Tranquilizar al paciente. No poner hielo, No hacer torniquetes, No hacer cortes, No succionar, No aplicar shocks eléctricos. No dar alcohol, kerosene ni nada que altere el estado de conciencia del paciente. Inmovilizar la extremidad afectada con una férula removible, en posición funcional. Hacer un lavado profuso de la herida y continuar haciéndolo durante los próximos días. Aplicar toxoide tetánico profiláctico. Aplicar antihistaminico de acción rápida (hidroxicina). Aplicar Antibióticos (penicilina cristalina / gentamicina). El diluyente se agrega al frasco y sin agitar se deja que el liofilizado se hidrate (5 minutos) y se disuelva. Luego, agite suavemente hasta obtener una solución homogénea color amarillo traslúcido. Se aplica lentamente, inicialmente para evaluar la tolerancia del paciente al suero y si después de 10 minutos lo ha tolerado bien, se pasa la infusión en 20 minutos. La dosificación de suero para niños y adultos es la misma, pues la dosis no se calcula por kilo de peso. Como es imposible determinar la cantidad de veneno inyectado, la dosis se define por la clínica del paciente y por la capacidad de neutralización de veneno que tenga el suero. Es importante conocer que 10c.c. de suero antiofídico polivalente liofilizado neutraliza como mínimo 25mg de veneno Bothrops atrox, 25mg de veneno Bothrops asper, 10mg de veneno Crotalus durissus y 10 mg de veneno de Lachesis muta. En todo caso, lo ideal es iniciar con una dosis que se calcule que va a neutralizar el veneno y de acuerdo con la evolución clínica, si continúan los signos y síntomas de envenenamiento se aplican más dosis. Cuando no se tenga facilidades para la aplicación intravenosa se puede inyectar el antiveneno por vía intramuscular.

Antecedentes de angioedema y/o shock anafiláctico. Se contraindica la realización de FASCIOTOMIAS, porque la fisiopatología del edema es por un daño microcirculatorio. La neutralización del veneno por el suero es la mejor medida para disminuir el edema y por lo tanto el aumento de la presión en los compartimientos de los miembros. Es muy importante recordar que no se debe practicar procedimientos quirúrgicos sin haber iniciado la sueroterapia, por el riesgo de sangrado incontrolable en el paciente anticoagulado.

La mayoría de los accidentes ocurren debido a la intrusión de la víctima en el espacio territorial de la serpiente. La prevención de los accidentes depende de conocer los hábitos y la distribución del agente agresor (serpiente, araña y/o alacrán), y evitar hábitos que propicien la ocurrencia de los accidentes. Debe recordarse que el riesgo de sufrir accidentes ofídicos puede disminuir significativamente con el empleo de medidas simples como: Evitar introducir las manos o pies en lugares donde una serpiente podría estar oculta. Transitar con cuidado por senderos o a través de terreno accidentado (monte, plantaciones, jardines) en los que pudiera haber serpientes. Utilizar herramientas (o una vara) para remover la vegetación o los desechos orgánicos. Proteger pies y piernas con zapatos; use polainas de cuero o botas de caña alta y gruesa. Usar pantalones largos sueltos y de tela gruesa para contribuir a la protección. Proteger las manos y antebrazos con guantes y/o mangas de un material que resista la mordedura. El uso de camisa de mangas largas y gruesas puede también contribuir a la protección. Limpiar y mantener libre de vegetación y deshechos una franja de terreno alrededor de cada zona rural.